Capa de ozono

 La capa de ozono es una franja de gas ubicada en la estratósfera, entre los 15 y 35 kilómetros de altitud, encargada de filtrar los rayos ultravioleta del sol. Sin esta barrera natural, la radiación solar sería mucho más intensa y dañina para los seres vivos. Por eso, su presencia es indispensable para la vida en la Tierra. 

En México, donde las temperaturas y los niveles de radiación son elevados durante gran parte del año, la protección del ozono se vuelve aún más relevante. Su deterioro no solo afecta al clima, sino también a la salud, la agricultura y los ecosistemas marinos. Comprender su función y los riesgos de su debilitamiento permite tomar decisiones más conscientes en el día a día. 

Aunque los esfuerzos internacionales han ayudado a reducir la emisión de gases que destruyen esta capa, su recuperación es lenta. Mantenerla requiere compromiso global, políticas ambientales firmes y la participación activa de cada persona en el consumo responsable y el cuidado del entorno. 

Destrucción de la capa de ozono 

La destrucción de la capa de ozono ocurre principalmente por la liberación de compuestos químicos como los clorofluorocarbonos (CFC), halones y óxidos de nitrógeno. Estas sustancias, utilizadas durante años en refrigeradores, aires acondicionados y aerosoles, ascienden a la atmósfera y descomponen las moléculas de ozono, debilitando su capacidad de protección. 

Cuando esa barrera se daña, los rayos ultravioleta alcanzan la superficie terrestre con mayor intensidad. Esto puede provocar daños en la piel, enfermedades oculares, afectaciones en los cultivos y desequilibrios en los ecosistemas. En regiones de México con alta exposición solar, como el norte y el sureste, los efectos son especialmente notorios. 

Gracias a acuerdos como el Protocolo de Montreal, la producción de estas sustancias ha disminuido, pero sus residuos aún permanecen en la atmósfera. Por eso, seguir promoviendo alternativas sostenibles, reciclar adecuadamente los aparatos viejos y usar productos ecoamigables son pasos fundamentales para frenar este proceso. 

Además, el cambio climático también influye en la distribución del ozono, ya que las variaciones de temperatura alteran las corrientes de aire en la estratósfera. Cuidar la capa de ozono, por tanto, es inseparable de reducir la huella de carbono y proteger los recursos naturales del planeta. 

Cuál es la función de la capa de ozono 

La principal función de la capa de ozono es absorber la radiación ultravioleta tipo B y tipo C, que resultan dañinas para los seres humanos y otros organismos vivos. Este filtro natural reduce la cantidad de radiación que llega a la superficie, protegiendo la piel, los ojos y el sistema inmunológico. 

Sin embargo, su papel va más allá del cuidado de la salud. También ayuda a mantener la temperatura y el equilibrio energético del planeta, regulando el clima global. Gracias a su acción, la vida vegetal y marina puede desarrollarse de forma estable. Sin ella, los ecosistemas sufrirían daños irreversibles. 

En México, donde la exposición solar es alta casi todo el año, comprender esta función es clave. Utilizar protector solar no solo es una medida de prevención personal, sino un reflejo del respeto por los recursos naturales. Productos como Banana Boat, con fórmulas resistentes al agua y seguras para la piel, refuerzan esta cultura del autocuidado frente al sol. 

Agotamiento de la capa de ozono 

El agotamiento de la capa de ozono es el resultado de décadas de contaminación atmosférica. Aunque la reducción de gases dañinos ha sido notable, el proceso de recuperación tomará varios años. En zonas específicas del planeta, como la Antártida, se han formado “agujeros de ozono” donde la protección se ha debilitado drásticamente. 

En América Latina, y especialmente en México, los niveles de radiación ultravioleta son preocupantes. Esto se traduce en una mayor necesidad de protección diaria, sobre todo en ciudades con altitud elevada como la Ciudad de México o Toluca, donde los rayos solares son más intensos. Los especialistas recomiendan evitar la exposición entre las 10:00 a.m. y las 3:00 p.m., además de usar ropa ligera, sombreros y bloqueador solar. 

El agotamiento del ozono también afecta los suelos agrícolas y la vida marina, ya que el exceso de radiación altera los ciclos biológicos. Cuidar esta capa es proteger la cadena alimenticia y las fuentes naturales de alimento que sostienen la vida en el planeta. 

Marcas como Banana Boat promueven la importancia del uso diario de protector solar, no solo como una medida estética, sino como un hábito responsable frente al aumento de la radiación. Al hacerlo, contribuyen a una conciencia ambiental que refuerza la necesidad de cuidar tanto la piel como la naturaleza. 

Cómo cuidar la capa de ozono 

Proteger la capa de ozono comienza con acciones simples pero efectivas. Evitar los aerosoles con CFC, revisar los equipos de refrigeración y optar por productos ecológicos son medidas que reducen la emisión de gases nocivos. También es importante promover el reciclaje y el uso racional de la energía, ya que cada pequeño cambio cuenta para disminuir la presión sobre el ambiente. 

Usar protector solar todos los días es otra manera de generar conciencia. En un país donde la radiación solar es constante, proteger la piel debe convertirse en un hábito. Las fórmulas modernas, como las de Banana Boat, ofrecen protección de amplio espectro sin afectar los ecosistemas marinos, apoyando así el equilibrio entre cuidado personal y responsabilidad ambiental. 

La educación ambiental juega un papel central en este proceso. Fomentar en las escuelas, hogares y comunidades el conocimiento sobre la capa de ozono ayuda a formar generaciones más comprometidas con el planeta. Cuidarla es cuidar la salud, la biodiversidad y el futuro de todos los seres vivos. 

Preguntas frecuentes